-Hermano pastor, por favor oren por mi negocio, para que el Señor envíe bastantes clientes, pues casi estoy quebrado.
El pastor habló a toda la congregación y les dijo:
-Pónganse de pie y hagamos una oración que llegue al cielo para que Dios envíe muchos clientes pues, El señor escucha a los que le claman
Antes de comenzar a orar, el pastor le pregunta al hermano propietario del establecimiento:
- Hermano ¿Cuál es su negocio?
A lo que el comerciante cristiano le contesta:
-Hermano yo tengo una funeraria