Una señora está llegando al confesionario y un joven se le adelanta.
Medio a disgusto, la señora acepta que pase primero el joven.
En el confesionario, el cura pregunta:
- Bueno hijo, y ¿en qué trabajas?
- Soy acróbata en un circo.
- Ah, que bien... Podrías haceme una demostración?
El joven, se manda unos ejercicios por encima de los bancos y un par de saltos mortales con doble tirabuzón.
Cuando el turno de la señora, el cura pregunta:
- Dime hija, haz pecado?
Y la señora responde:
- Bueno, viendo las penitencias que pone le diría que no.
Medio a disgusto, la señora acepta que pase primero el joven.
En el confesionario, el cura pregunta:
- Bueno hijo, y ¿en qué trabajas?
- Soy acróbata en un circo.
- Ah, que bien... Podrías haceme una demostración?
El joven, se manda unos ejercicios por encima de los bancos y un par de saltos mortales con doble tirabuzón.
Cuando el turno de la señora, el cura pregunta:
- Dime hija, haz pecado?
Y la señora responde:
- Bueno, viendo las penitencias que pone le diría que no.